Ciudad de Madrid. (Imagen: Solid Forest)
Pavimentos Fríos "Cool Pavements" frente al Cambio Climático
Uno de los objetivos del proyecto REPARA 2.0 es el desarrollo de pavimentos asfálticos de alta reflectancia, pavimentos fríos o “cool pavements”, capaces de reducir el calentamiento actual de las superficies de las ciudades y en consecuencia la temperatura ambiente. Su fundamento se basa en el uso de superficies que presenten una alta reflectancia o albedo de la radiación solar.
CHM está siendo la encargada de desarrollar estas nuevas mezclas asfálticas de alta reflectancia, con el apoyo de REPSOL, que desarrolla nuevos betunes; dichas mezclas combaten el efecto isla de calor urbana y son más resilientes frente al cambio climático.
En la actualidad, el mundo está inmerso en un proceso de calentamiento global debido al cambio climático y con el transcurso del tiempo hay un mayor número de personas que viven en las ciudades. Aunque pueda parecer que entre estos dos factores no existe ninguna relación, tienen una importante conexión debido a un fenómeno conocido como la “Isla de Calor Urbana-ICU”. Dicho fenómeno se produce cuando un área, creada por el hombre, es significativamente más caliente que las áreas circundantes, y esta diferencia de temperatura se acentúa especialmente por la noche.
Las islas de calor urbanas aparecen porque se han sustituido superficies rurales generalmente verdes y húmedas por otras superficies que están hechas de materiales de alta capacidad térmica y baja reflectancia solar o albedo, como son asfalto, hormigón, tejas, membranas impermeabilizantes oscuras, ladrillo, etc., capaces de absorber y almacenar energía en forma de calor. Este hecho, unido a una mayor demanda de energía (aire acondicionado, actividad productiva, transportes, etc.), una escasa ventilación y escasas turbulencias locales comparada con las zonas rurales, crean un efecto de sobrecalentamiento del área urbana.
Imagen: Saint-Gobain PPC
Las islas de calor urbanas pueden afectar negativamente tanto a la comunidad urbana como al medio ambiente en general, siendo los efectos perniciosos más importantes los siguientes:
- El aumento de consumo energético. Las temperaturas cálidas en las ciudades aumentan la necesidad de aire acondicionado (A / C) para enfriar edificios, sobrecargando la red eléctrica con el consiguiente riesgo de caídas de tensión y apagones.
- Disminución de la calidad del aire. El aire más cálido acelera la formación de niebla o smog (ozono troposférico) a partir de los contaminantes atmosféricos como son los óxidos de nitrógeno y compuestos orgánicos volátiles.
- Deterioro de la salud. La mayor temperatura del aire unida a su menor calidad puede agravar enfermedades directamente relacionadas con el calor (deshidratación, calambres, golpe de calor, síncope por calor,…), relacionadas con las vías respiratorias (como asma o EPOC), arritmias, etc.
Los pavimentos tradicionales en las ciudades, que representan alrededor de un tercio de las superficies urbanas, se calientan con el sol por absorber entre el 80 y el 95% de la energía solar incidente. Estos pavimentos agravan el efecto de isla de calor urbana calentando el aire a nivel local.
Ciudad de Baton Rouge, U.S.A. (Imagen mediante cámara termográfica: NASA)
Una alternativa para mitigar el efecto isla de calor urbano será pavimentar las calles y aceras con pavimentos que están siendo desarrollados en el proyecto REPARA 2.0. que reflejen la energía solar que incide durante el día (pavimentos de alta reflectancia solar o albedo – Cool Pavements), lo cual disminuirá su calentamiento y repercutirá en una reducción de la temperatura ambiente
Por lo tanto, las ventajas que vamos a tener mitigando el efecto de isla de calor urbana con la implantación de pavimentos de alta reflectancia serán las siguientes:
Ahorro de energía y reducción de costes y de emisiones de gases de efecto invernadero.
Menor consumo de aire acondicionado en los edificios, y posible reducción de la energía necesaria para el alumbrado público por la noche (bombillas de menor potencia).
Mejora de la calidad del aire.
Al disminuir la temperatura del aire urbano se ralentizan las reacciones químicas atmosféricas generadas por la niebla contaminante o smog (comentada anteriormente) propia de la contaminación atmosférica.
Mejora de la comodidad y de la salud de los peatones.
Disminuyen las enfermedades relacionadas con las altas temperaturas y contaminación del aire. Los peatones también se benefician de un aire y pavimento más fresco.
Todo un reto ilusionante para la mejora de la vida en nuestras ciudades.